Forest Shuffle

En Forest Shuffle, los jugadores compiten por recolectar los árboles más valiosos y atraer especies a ellos, creando así un hábitat ecológicamente equilibrado para la flora y la fauna.

Para empezar, cada jugador tiene seis cartas en la mano: cartas que representan un tipo de árbol o dos habitantes del bosque (animal, planta, hongo, etc.). Estas últimas se dividen por la mitad, ya sea vertical u horizontalmente, con un habitante en cada mitad.

En un turno, se pueden robar dos cartas (boca abajo del mazo o boca arriba del claro) y añadirlas a la mano, o jugar una carta pagando su coste y poniéndola en juego.

Durante la preparación, se colocaron tres cartas de invierno en el tercio inferior del mazo. Al robar la tercera carta de invierno, la partida termina inmediatamente y los jugadores suman sus puntos según los árboles y habitantes de su bosque. Quien consiga más puntos gana.

Forest Shuffle es el primero de una línea de juegos Lookout que luce la etiqueta Lookout Greenline, está producido en papel con certificación FSC y evita el plástico por completo.